Para conocerme mejor.
Para dar voz a todas mis partes.
Para ser más consciente.
Para despojarme de automatismos.
Para decir que no.
Para decir que sí.
Para liberarme, para descubrirme, para disfrutarme.
Para ir a mi ritmo.
Para ver más allá de la obviedad.
Para respirar mis necesidades, para atenderlas.
Para transformarme.
Para cuidarme.
Para quererme.
Para aceptarme.